Alumnos de primer año de la Escuela de Enfermería UANDES recibieron su uniforme clínico

La entrega del uniforme de la Escuela de Enfermería de la Universidad de los Andes es una ceremonia que marca el inicio de las primeras prácticas clínicas de los 110 estudiantes de primer año de la carrera, en donde visten por primera vez el uniforme que los acompañará desde ahora en adelante en la labor de cuidar a las personas. “Tras este acto de ponerse el uniforme, el estudiante siente y ve reflejada la confirmación de la vocación a la cual han adherido. Es una ceremonia muy simbólica, donde son acompañados por su familia y sus profesoras”, comenta Araceli Echeverría, Directora de la Escuela Enfermería Universidad de los Andes.

“La investidura es un momento muy especial, donde se concretan las ansias por iniciar el contacto con los pacientes. La entrega se realiza semanas previas antes de iniciar la práctica y sitúa al estudiante frente al escenario real. Tendrá ahora que contener el dolor del otro, suplir necesidades físicas y emocionales, evaluar los signos vitales, hacer entrevistas de salud y apoyar en las actividades de confort y alimentación. A su vez podrá integrar en su quehacer lo aprendido en las asignaturas previas, debiendo demostrar en plenitud su capacidad de asumir compromisos y hacerse responsable de otra persona. Con la entrega del uniforme clínico de enfermería el alumno comenzará a experimentar la vida de un adulto, en donde será inevitable la reflexión de qué rumbo tomará su vida”, explica María del Pilar Ureta, Directora Académica de la Escuela de Enfermería de la Universidad de los Andes.

“El jueves 27 de septiembre tuvimos la ceremonia de la investidura, en la cual usamos por primera vez nuestro uniforme de enfermería. Escuchamos unas lindas palabras de las profesoras y de nuestra presidenta del centro de alumnos. Junto con estas emotivas palabras, finalizamos la ceremonia recitando por primera vez el juramento, el cual diremos formalmente al egresar de la carrera con nuestro título profesional. Esta ceremonia me ha servido mucho para sentir que este sueño de ser enfermera se va haciendo realidad poco a poco. Es emocionante, luego del esfuerzo de este año, poder decir que ahora parte en serio, se siente más real ahora que tenemos nuestro uniforme. Con todo esto comienzan los nervios por nuestras primeras prácticas clínicas, aunque más allá de esto me da fuerzas para continuar y seguir poniéndole empeño y alegría a lo que va quedando del año”, detalla María Trinidad Laso, alumna de primer año de la Escuela de Enfermería UANDES.