Carreras de la salud desarrollan modelo de aprendizaje híbrido con simulación virtual

La Universidad se adjudicó un segundo Fondo de Desarrollo Institucional del MINEDUC para incorporar tecnología en las prácticas de salud, el que se suma al FDI para la educación a distancia.

Las Facultades de Medicina, de Odontología y de Enfermería y Obstetricia se adjudicaron fondos del Ministerio de Educación para hacer realidad el proyecto “Modelo de aprendizaje híbrido: Incorporación de la simulación virtual en la formación de los estudiantes de las carreras de la salud” (ver más). 

Este proyecto, en el que también participan las direcciones de Planificación y Desarrollo, Currículo y Aseguramiento de la Calidad, junto al Centro de Innovación Docente, busca fortalecer la formación clínica de los alumnos de pregrado de las carreras de la salud, implementando un modelo de aprendizaje clínico híbrido, que incorpore la simulación en realidad virtual y otras soluciones tecnológicas que complementen la simulación y prácticas clínicas. Por lo tanto, permitirá maximizar el uso de los campos clínicos, potenciando la preparación de los estudiantes, recibir retroalimentación personalizada objetiva e inmediata y aumentar la motivación del alumno por el autoaprendizaje, entre otros beneficios. 

Autoridades y profesores de las carreras de la salud se reunieron en noviembre de 2021 con el objetivo de conocer los beneficios y alcances de la simulación virtual para el aprendizaje de sus estudiantes.

Los estudiantes han probado algunas tecnologías de simulación virtual. En la foto, alumnas de Enfermería con visores de realidad virtual.

La simulación virtual utiliza la realidad virtual (RV) y es “una solución innovadora y costo-efectiva que, mediante la informática, crea un ambiente virtual multifacético diseñado para simular la presencia física de la persona en un espacio digital, con imágenes realistas multisensoriales con las que puede interactuar”, explica Bernardita Achondo, decana de la Facultad de Enfermería y Obstetricia. “Esto permite entrenar habilidades en ambientes o escenarios simulados, estructurados y controlados, los que se pueden visualizar en dispositivos electrónicos como celulares, computadores, tablets y visores de RV, de manera sincrónica o asincrónica”, agrega. 

José Miguel Simian, vicerrector Académico y de Investigación

José Miguel Simian, vicerrector académico de la UANDES, manifiesta que este proyecto es importante porque “define hacia donde irá migrando parte de la educación en estas áreas en el futuro. Representa, sin duda, una buena oportunidad para la Universidad de mejorar la enseñanza con estas tecnologías, con ventajas para estudiantes y pacientes”. 

Para definir la mejor alternativa, durante estos meses se han estado piloteando diversas soluciones tecnológicas, como telesimulación, realidad no inmersiva (computer base) e inmersiva. En este último caso, las alumnas de Enfermería Francisca Araya, Anais Agurto y Javiera Acuña coinciden en que los visores de RV dan una experiencia real, avisan cuando se hace algo incorrecto y se aprende de manera estructurada, siguiendo pasos y autónomamente. 

“Consideramos que hemos aprendido cosas valiosas que funcionan a distancia y que pueden seguir haciéndose de esa manera. El retorno a la presencialidad no significa el retorno a la misma presencialidad, sino a una apoyada también por aprendizajes que funcionan mejor a distancia”, asegura el vicerrector académico, José Miguel Simian.

Es por ello que el proyecto de Educación a Distancia, que corresponde al primer Fondo de Desarrollo Institucional (FDI) adjudicado y que va en su segundo año de ejecución, se orienta a que parte de los aprendizajes de estos años de pandemia puedan seguir utilizándose, por ejemplo, para alcanzar a nuevas audiencias fuera de la Región Metropolitana.

Liderado por el Centro de Innovación Docente, en los últimos meses se han implementado así tres salas de grabación para profesores, equipadas con tecnología que permite entregar material de apoyo complementario para los estudiantes de pre y postgrado. Este segundo semestre se habilitará un cuarto espacio para que los académicos aprendan a usar softwares de edición para sus videos y se incorporará tecnología para la grabación de podcast y una pantalla inteligente que simula un pizarrón. En cuanto a los cambios curriculares de las carreras, al cierre del primer año, cinco Comités Curriculares Permanentes (CCP) han analizado sus planes de estudio y elaboraron la propuesta de adaptación para la educación a distancia.

Esto representa ocho carreras de pregrado y 28 asignaturas, en las que se evaluó en profundidad el desarrollo de las modalidades de la educación a distancia. Para lograrlo, la Dirección de Currículo ha continuado capacitando a los CCP de las carreras para implementar la Metodología de Revisión y Adaptación Curricular, que se compone del análisis del plan de estudio, la elaboración del plan de adaptación, y la evaluación y definición de la modalidad de la asignatura.

Entre otros avances, a la fecha la Universidad cuenta con 36 salas HyFlex para realizar clases de manera presencial y remota al mismo tiempo, que se usan en pre y postgrado. Las salas cuentan con pantallas, micrófonos y cámaras Kaptivo, que permiten grabar lo que escribe el profesor en el pizarrón, digitalizarlo y transmitirlo vía web a los alumnos.