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Jueves 7 de Mayo de 2020
Darrin McMahon, Doctor en Historia de la Universidad de Yale, reflexiona sobre la igualdad y desigualdad a lo largo del tiempo.
¿Cómo entender la igualdad y desigualdad a través de la historia de la humanidad? ¿Cuándo se origina la desigualdad en la sociedad humana? ¿Qué motivos llevaron al hombre a valorar esta condición? Son algunas de las preguntas que desarrolló Darrin McMahon, Doctor en Historia de la Universidad de Yale y profesor de Dartmouth College, en la charla “La historia de la igualdad: Una historia intelectual”, organizada por Signos UANDES.
McMahon explicó que la igualdad se remonta a la época en que el hombre recolector se movía constantemente y no podía cuidar lo que poseía. Lo que tenía era lo que podía trasladar de un lado a otro, las posesiones eran escasas y la comida se compartía. “El homo sapiens vivía en condiciones de igualdad. De a poco la concentración de personas en aldeas y pueblos aumentó la desigualdad. En la casta guerrera y de los sacerdotes había desigualdad. Cerca del año 2.500 A.C. ya se habían creado varias formas de desigualdad como la esclavitud, el sacrificio humano y el patriarcado. Todas las civilizaciones tempranas del mundo exhiben estas características. ¿Y por qué ocurrió esta gran desigualdad? Académicos han apuntado a las presiones de la guerra, al hecho de someterse a líderes fuertes a cambio de protección y también a la religión. En el siglo XVIII tres cuartas partes de la población vivía en algún tipo de servidumbre, entre la esclavitud y el servicio”, comentó el Doctor en Historia de la Universidad de Yale.
Las distintas religiones, como el budismo, taoísmo, confucionismo, judaísmo e islam, también han dejado su influencia sobre el concepto de igualdad. “Las religiones reivindican a la humanidad en términos de familia, transmitiendo el mensaje de que todos somos hermanos, tenemos un mismo padre, creados por un solo Dios. Esto lo repetían constantemente los sabios y la igualdad se instaló como un ideal. El evangelio anuncia una ética de la igualdad, todos somos iguales en Jesucristo. El mensaje moral fue anunciado desde sus inicios diciendo que éramos seres humanos iguales”, agregó McMahon.
Hasta la revolución agrícola las personas eran desiguales. La revolución del siglo XVIII cambió profundamente los términos del debate, hablando de libertad, igualdad y fraternidad. “Y en el siglo XX empieza el discurso de la igualdad presentado universalmente, atribuyéndola al mérito. En el presente, en países pobres, el crecimiento económico aumenta la desigualdad salarial, pero en países ricos esa diferencia es más estrecha. En economías capitalistas se cobran impuestos para lograr igualdad, nace un nuevo tipo de casta llamada aristocracia económica. La desigualdad económica en el siglo XX siguió aumentando a medida que la sociedad se fue enriqueciendo. En Chile ha aumentado la percepción de la igualdad ¿y qué es lo que quiere la gente? Más igualdad en educación, salud y trabajo”, concluyó el experto.