Suscríbete a nuestro Newsletter
y mantente informado de todo
Martes 3 de Diciembre de 2019
La investigación, que se realizó en 40 hospitales y clínicas a lo largo del país, establece que el número de enfermeras influye directamente en los días de hospitalización o en el riesgo de mortalidad, que puede ser hasta un 20% mayor en centros con menos profesionales.
La dotación de enfermeras en los hospitales públicos chilenos es insuficiente y pone en riesgo tanto la salud de los pacientes como la de las mismas profesionales, según un estudio realizado por la Escuela de Enfermería de la Universidad de los Andes.
Los resultados confirmaron la subdotación de estos profesionales y evidenciaron, además, una gran variabilidad de dotaciones entre hospitales del sector público. En promedio, en unidades no críticas de adultos, una enfermera es responsable de 14 pacientes, con un rango que va de 9 a 23 personas. El problema es más grave durante los turnos de noche, donde la subdotación empeora, llegando incluso a duplicarse el número de pacientes.
Por otro lado, este estudio demostró que, a mayor número de pacientes por enfermera, aumenta la mortalidad y los riesgos. Esto también lo confirma una vasta evidencia internacional que demuestra que las dotaciones de profesionales de la enfermería guardan estrecha relación con la calidad y seguridad de la atención de los pacientes.
Ejemplo de esto, es que en la gran mayoría de los países de Europa estos profesionales cuidan un número no mayor a 10 pacientes por turno. En Estados Unidos, la legislación de California prohíbe que una enfermera de una unidad de adulto no crítica tenga más de 5 pacientes a cargo.
Una realidad que no deja de impactar, ya que las enfermeras son las profesionales del área de la salud de quienes depende en forma crítica la gestión administrativa y clínica de los hospitales y que finalmente son responsables de gestionar y brindar cuidados a los pacientes 24/7 los 365 días del año.