Lunes 25 de Noviembre de 2024

“Un líder hoy debe pensar en cómo su labor contribuye al bienestar de la sociedad y de su entorno”

María Ignacia Moreno, alumni ADS (2004) ganó el Premio Mujer Líder 2024 por su destacada labor en el ámbito social, servicio a los demás y creación de redes de apoyo para los más necesitados.

María Ignacia Moreno -alumni ADS 2004- ha sido recientemente galardonada con el prestigioso Premio Mujer Líder 2024, un reconocimiento que destaca su labor en el ámbito social y su visión de liderazgo, centrada en el servicio y la solidaridad. “Recibir este premio es un reconocimiento al trabajo de las fundaciones y al esfuerzo por hacer frente a las situaciones que atraviesa el país. Para mí, que el trabajo social sea considerado liderazgo, es fundamental“, afirmó. Para ella, el servicio social es una de las formas más puras de liderazgo, ya que conecta el trabajo profesional con la ayuda al prójimo, reflejando un compromiso directo con las personas y la comunidad.

“Un líder hoy debe pensar en cómo su labor contribuye al bienestar de la sociedad y de su entorno”, señaló. Esta perspectiva, añadió, debe ir acompañada de coherencia personal y profesional, mostrando consistencia en los valores y principios que se transmiten a través de las acciones cotidianas.

Uno de los pilares del liderazgo para María Ignacia es la creación de redes de colaboración entre distintos sectores, tanto públicos como privados. “Es esencial juntar buenas voluntades y proyectos, independientemente de las diferencias, con el objetivo final de beneficiar a los demás”, expresó. Esta capacidad para tejer redes de apoyo ha sido clave en su trabajo, en la Fundación Banco de Ropa, especialmente en la implementación de proyectos que buscan impactar positivamente a la sociedad.

En sus metas a futuro, la alumni ADS espera consolidar su trabajo en los centros penitenciarios, especialmente en San Miguel, y la regionalización de su labor en la Fundación Banco de Ropa, que incluye la entrega de donaciones de ropa nueva a personas necesitadas, desde el norte hasta el sur de Chile, incluso hasta Isla de Pascua. Además, su labor en la fundación tiene un triple impacto positivo, como el reciclaje textil, que genera empleo y dignifica a las mujeres al proporcionarles trabajo con el que pueden mantener a sus familias.

A pesar de los desafíos que enfrenta diariamente, especialmente en el trabajo con fundaciones en tiempos de catástrofes, María Ignacia Moreno cuenta que el equilibrio entre la vida personal y profesional es complicado, “pero la motivación viene del amor a los demás y la creencia de que podemos cambiar las cosas para mejor”, explicó.

María Ignacia, quien ha trabajado en diversas fundaciones, continúa con su labor para proveer herramientas y oportunidades a quienes más lo necesitan. Su visión, motivada por el deseo de servir, no solo transforma vidas, sino que también inspira a otras personas a hacer lo mismo.